Entender por qué el cuerpo produce dolor •

Mucha gente sufre de dolor en una o varias partes de su cuerpo. Las terapias y los medicamentos recetados para reducir el dolor pueden ser efectivos para algunas personas, pero no para otras, y solo generan frustración y confusión. Por eso es importante equiparse con los conocimientos actuales sobre el dolor.

En realidad, ¿qué es el dolor?

El dolor es tan fundamental para la condición humana que a menudo no pensamos en considerar sus características. La explicación más simple es que el dolor es cuando algo te duele. Algo te molesta, te hace detener lo que estás haciendo, cambiar de posición o evitar lo que crees que te está causando dolor.

La mayoría de las personas asocian el dolor con una lesión física. Aunque este suele ser el caso, también hay casos más complejos como el dolor crónico y el dolor. fantasma donde no hay daño físico evidente. De hecho, el dolor es en gran parte un fenómeno neurológico.

La incomodidad física y mental del dolor es algo que puede resultar estresante y desalentador. Sin embargo, la mayoría de las personas están tan acostumbradas a las explicaciones fisiológicas de su enfermedad que no se dan cuenta de que el dolor puede provenir de un círculo vicioso en el trabajo, por ejemplo. El dolor prolongado exacerba el estrés, que eventualmente puede atrapar al cuerpo aún más profundamente en el patrón de dolor.

¿Cuál es el proceso hasta que podemos sentir dolor?

La vieja teoría del dolor sugería que el área lesionada del cuerpo envía señales de dolor al cerebro. En otras palabras, el dolor proviene del nivel del tejido. Sin embargo, ahora sabemos que esto no es del todo exacto. Hay ciertas células llamadas nociceptores que detectan estímulos nocivos y transmiten esta información al cerebro. Después de eso, sin embargo, depende del cerebro crear la sensación de dolor o no. El dolor realmente no proviene de un lugar local.

Esto no quiere decir que el dolor sea simplemente una decisión de la mente. En cambio, piense en el cerebro como el capataz de una fábrica que utiliza la experiencia pasada, las inspecciones de máquinas, los informes de los trabajadores y otros marcadores para regular las operaciones.

La nocicepción es importante en la producción de dolor, pero también lo son otras cosas menos tangibles. El factor subconsciente es una de las fuentes que el cerebro considera al determinar cuánto dolor crear. En este proceso, el cerebro también analiza experiencias pasadas, contextos sociales, creencias y una variedad de otras variables.

¿Cuanto más severo es el dolor, más grave es la condición de la enfermedad? No necesariamente

Una creencia común es que las condiciones físicas, la postura y otros problemas estructurales del cuerpo son la causa principal del dolor. Esta es una idea imprecisa e incluso peligrosa si lleva a las personas a creer que, por ejemplo, las proporciones de sus cuerpos son “pobres”. Estos son pensamientos que pueden tener un efecto negativo en sí mismos y no son útiles para lidiar con su dolor.

Obviamente, a nadie le gusta el dolor, pero el dolor es necesario para sobrevivir. El dolor es un poderoso impulso de evitar acciones y comportamientos que podrían dañarlo. Algunas personas nacen sin sensibilidad al dolor, una condición llamada analgesia congénita. Si bien puede considerarlos afortunados, en realidad corren mucho más riesgo de sufrir lesiones fatales porque no se dan cuenta cuando se lesionan.

El punto es que el dolor es un sistema de alarma, una salida del cerebro que está destinada a defenderse de una amenaza percibida alentándote a evitarla. Esta amenaza percibida generalmente implica daño tisular, como un hematoma o una fractura. En este caso, abordar el problema físico reducirá la "amenaza" y también el dolor. Sin embargo, aunque mantener su cuerpo sano y activo no es suficiente, es hora de enfrentar la fuente de su dolor.

¿Cómo debemos lidiar con el dolor?

Si cierta posición o movimiento le causa malestar, busque formas de aliviarlo (reduzca el movimiento o muévase más lentamente) para que no haya más dolor. Busque movimientos que sean más "amigables" para su cuerpo. Le enseña a tu sistema nervioso que no todo es peligroso. A medida que más posiciones se vuelvan libres de dolor, notará que su miedo ha disminuido y está ganando impulso para liberarse del dolor.

Sin embargo, quizás la acción más importante sea reafirmar su valor y su propósito. El dolor es una molestia, pero no dejes que te gane.

Solo recuerda eso: si te duele, significa que tu cerebro se preocupa por ti.


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